El VII Congreso Latina de Comunicación Social se desarrollará hasta el 11 de diciembre, con 280 investigadores internacionales inscritos y 250 ponencias
El profesor del Departamento de Ciencias de la Comunicación y Trabajo Social de la Universidad de La Laguna, Samuel Toledano, fue el ponente inaugural ayer, 9 de diciembre, del VII Congreso Latina de Comunicación Social, con una conferencia en la que, tomando como base argumental la novela de George Orwell 1984, reflexionó sobre la influencia de las pantallas en la sociedad actual. “Vivimos una democracia que ya no está solo mediatizada sino monitorizada”, afirmó en referencia al masivo uso que las personas realizan de los medios sociales.
Aunque las ponencias de este congreso comenzaron a presentarse el lunes 7 de diciembre, fue ayer cuando se procedió a la inauguración oficial de esta reunión científica en una ceremonia presidida por el vicerrector de Relaciones con la Sociedad, Francisco García, en la cual también estuvieron el catedrático y presidente de la Sociedad Latina de Comunicación Social (entidad organizadora del encentro) José Manuel de Pablos; el presidente del comité organizador, Javier Herrero; y el director de Departamento de Ciencias de la Comunicación y Trabajo Social, Fernando Iturrate.
El vicerrector citó a Jeremy Rifkin para mencionar que en estos momentos no se está viviendo una “época de cambio sino un cambio de época”, y apostilló que en ese proceso es especialmente evidente en el mundo de la comunicación. Se trata de una gran transformación que está sucediendo a una gran velocidad y está obligando a todos los profesionales a reinventarse. En este contexto, García reivindicó la universidad como el ámbito más adecuado para reflexionar de una manera más sosegada y ecuánime sobre todo lo que está sucediendo, algo de lo que se encarga, precisamente, el congreso.
José Manuel de Pablos se congratuló del éxito obtenido por esta convocatoria del congreso, que en su séptima edición supera los 280 inscritos y las 250 ponencias. Recordó que, además de la divulgación de investigaciones, uno de los principales objetivos de este encuentro internacional siempre ha sido facilitar los contactos entre investigadores de instituciones diferentes y, de este modo, estrechar lazos entre centros. También señaló el éxito de la revista Latina que da nombre a la sociedad organizadora, que por cuarto año consecutivo está entre las 100 publicaciones más relevantes de su materia en Google Scholar.
Consumidores o ciudadanos.
Tras la inauguración, Samuel Toledano dictó a conferencia “El último selfie de Winston Smith. El periodismo en tiempos distópicos”, en la cual realizó una serie de paralelismos este la novela 1984 y la sociedad actual. En su opinión, las personas del siglo XXI tiene muy bien asumido su rol como consumidores, y todo el aparato institucional está organizado para que así se perpetúe. Sin embargo, el ponente se cuestionó si el rol como ciudadano estaba igualmente asumido.
De este modo, reflexionó que si un electrodoméstico está defectuoso, todas las personas saben cuáles son sus derechos y no dudan en reclamar. Sin embargo, cuando lo que falla es una institución, ¿dónde está el libro de reclamaciones? ¿Si un gobierno no cumple su programa, es lógico esperar cuatro años para poder protestar por vía electoral?
También llevó el argumento al mundo de la prensa: “¿Han devuelto alguna vez un periódico? Nadie reclama porque en ellos se mezcle la opinión y la información o haya publireportajes pagados por instituciones sin ninguna clase de aviso sobre ese hecho. Debemos recordar que la información es un producto, pero también un derecho”.
Toledano indicó que la profecía distópica de Orwell, en la que las pantallas eran omnipresentes y controlaban a la ciudadanía, se había cumplido de una forma inesperada: ahora son las personas las que portan las pantallas y voluntariamente no dudan en ofrecer información continua sobre qué hacen, cómo están, con quién y dónde. Todos esos datos que se han volcado de manera lúdica son recopilados por las autoridades y utilizados por las compañías comerciales.
De este modo, la vida de las personas es cada vez más transparente, con todas las repercusiones tanto positivas como negativas que ello conlleva. Sin embargo, cuando se solicita una similar transparencia a las instituciones gubernamentales o económicas, la respuesta es la opacidad. Como ejemplo, recordó una investigación reciente en la que participó sobre la elaboración de un mapa del poder en Canarias, en la que se solicitaba a los empresarios canarios información sobre sus ingresos y la respuesta era siembre negativa.
En este contexto, señaló que el periodismo lo estaba haciendo “muy mal”. Cada vez proliferan más las notas de prensa o informaciones irrelevantes sobre políticos en actos de toda índole, mientras que los profesionales de la comunicación ya no informan de lo que realmente es importante. De hecho, ya está en cuestión hasta la propia pervivencia de los periodistas, dado que ya se están investigando algoritmos matemáticos capaces de redactar notas de prensa.
De este modo, para Toledano la única posibilidad de autoafirmación de los periodistas pasa porque éstos no se dediquen únicamente a contar la realidad, sino a explicarla y contextualizarla, es dar las claves que van más allá del hecho y del dato. “Ya no vale con, simplemente, poner un micrófono o escribir un tuit”, sentenció el experto.
Nota de prensa emitida por el Gabinete de Comunicación de la ULL.
Comentarios recientes